Un sistema ERP es un software complejo que requiere mucha planificación a la hora de implantarse. Los errores que se pueden presentar son de muchas tipologías y algunos son evitables si se tienen en cuenta las precauciones adecuadas.
En plena era de la digitalización, la implementación de un sistema ERP en una empresa supone un cambio en la forma de trabajar, por eso, la elección del ERP adecuado destaca como uno de los aspectos más complicados de este proceso de implementación.
Motivos por los que implementar un Software ERP.
Las razones por las una empresa decide implementar un ERP son muy diversas. Desde mejorar el rendimiento del negocio automatizando muchas de las tareas más habituales de cada sector, optimizando cadenas de producción, gestión documental, flujos de trabajo y procesos que, de otra forma, podrían requerir mucho tiempo y recursos…, servir mejor a los clientes y reducir el capital humano, hasta la de colocar a la empresa en un posición competitiva que permita su crecimiento, tanto nacional como internacional.
Gracias a los sistemas ERP la empresa puede mejorar sus plazos de entrega, así como coordinar diferentes regiones y delegaciones.
Principales errores al elegir e implementar un Software ERP.
El proveedor, su experiencia, su trayectoria y su tasa de éxito, es otra de las claves a la hora de evitar los problemas al migrar un ERP.
– Falta de tecnología adecuada: Sin los instrumentos necesarios o con unos que no respondan a las necesidades de la empresa, la empresa va directa al fracaso. Lo primero a tener en cuenta es si el proveedor tecnológico cuenta con la tecnología necesaria para resolver los problemas a los que se enfrenta tu negocio.
La implementación del software ERP es una inversión a largo plazo diseñada para cambiar tu negocio a mejor. Al comprar un ERP, la solución más barata no siempre es la mejor. Tómate el tiempo necesario para explorar las diferentes opciones y asegurarte de obtener la mejor relación calidad-precio posible con respecto al papel que debe jugar en tu compañía. Conviene una lista de los problemas que estás tratando de resolver y las oportunidades que deseas maximizar en tu negocio.
– Estimación real o incompleta: Conocer la envergadura del proyecto es clave para que no se produzcan retrasos o interrupciones en los procesos empresariales, y elegir un ERP capaz de cubrir todas las necesidades y carencias de la empresa. Esta precaución es tan válida para la organización, como para el proveedor, que por su inexperiencia o falta de comunicación con la empresa, puede caer en el error de estimar el trabajo de forma poco eficiente.
– Falta de metodología:Cuando un partner es capaz de sistematizar la multitud de piezas móviles que tiene la implementación de un ERP, surge una metodología. Asegúrate de que el proveedor te asesora con la mejor estrategia para tu sector y que su ERP cumple con los requisitos para llevarla a cabo.
A nivel interno también nos podemos encontrar con problemas que hagan que la implantación no sea un éxito, por lo que se ha de concienciar a todo el equipo para remar juntos en la misma dirección y hacia el mismo objetivo.
– Falta de apoyo de la dirección de la empresa: Si la dirección no apoya un proceso que dura de media un año, comenzará con mucho brío y terminará perdiendo fuelle. La dirección debe ser la primera que se comprometa con dedicación, recursos materiales y capital humano responsable de la implantación.
– Expectativas irreales: Un ERP es una herramienta de gran potencia para mejorar los procesos empresariales industriales, pero no es milagroso. Si los flujos de trabajo por parte de los trabajadores son poco eficientes o hay defectos en la arquitectura organizacional de la empresa, un ERP no podrá solucionarlos.
– No estimar correctamente la envergadura del proyecto: No podemos obviar la envergadura de los cambios, ni del tiempo que requerirá la planificación y ejecución de los mismos. Para reducir el riesgo de incumplir estas protecciones, es necesario una correcta recopilación de los mismos, así como un acceso rápido para su modificación, cancelación o supresión.
– Falta de control, actualización y seguimiento: Este proceso no acaba cuando termina la implementación, un ERP ayuda a que la empresa mejore su rentabilidad y facilitará el trabajo de los diversos departamentos, pero no podemos olvidar que es una herramienta y no una sustitución de la mano de obra. El seguimiento para evaluar su eficacia y el control de los indicadores que determinarán si ha sido un éxito o no, es otro de los factores que repercuten en un retorno de la inversión positivo.
Desde Código10 Soluciones Informáticas recomendamos emplear tiempo y esfuerzo en realizar un buen proceso de selección de su ERP, para no tener que perderlo, junto a un probable coste económico, si tiene que reparar lo que pudo haberse prevenido desde el inicio. Por eso, le invitamos a conocer nuestros software y herramientas de gestión y a informarse sin compromiso de todo cuanto podemos hacer por su negocio.